A la altura de la ermita de la Virgen de los Remedios te recomendamos cruzar el río buscando la carretera que en seis kilómetros nos conducirá hasta los pies del Castillo de Castilnovo. Aquí la ruta es continuar por el pequeño ramal que baja hasta la carretera de Segovia a Cerezo de Abajo, SG 205. Cruzamos ésta y continuamos por un camino bien delimitado que nos conducirá hasta la carretera local de Segovia a Sepúlveda. Una vez aquí cruzamos a su lado izquierdo y continuamos por ésta hasta un puente de piedra que cruza nuestro río. Pasado el puente tomamos el camino que sale a nuestra izquierda.
Más adelante vemos un valle de verticales paredes de piedra, y durante algunos kilómetros se abre una amplia vega de campos de cultivo.
Seguimos, pues, nuestro camino siempre en la misma dirección que el río ahora situado a nuestra izquierda.
A la altura de Consuegra encontrarás un camino que vadea el río. Debemos dejar el camino y continuar casi campo a través siempre paralelos al río hasta llegar a una carretera local. Descendiendo unos metros por ésta debemos coger el camino situado en su margen derecho, en el sentido de nuestra marcha, justo antes de llegar al puente que vuelve una vez más a cruzar el río. Continúa nuestra senda unos 600 metros por este camino el cual debemos dejar a nuestra derecha, justo cuando empieza a empinarse, para buscar de nuevo el cauce del San Juan. Las miradas de los buitres te acompañarán.
Llegados a las fuentes del Río San Juan, que es fácil localizar en la distancia por el depósito de agua de su captación, debemos continuar por su orilla derecha que en unos escasos dos kilómetros nos llevará hasta el molino del que fuera San Miguel de Neguera.
¿Cuándo venir?
Cualquier época del año es buena, si bien recomendables son la primavera y el otoño, éste especialmente interesante por el cambio de hoja de las choperas que pueblan algunos tramos del río, haciendo de ello un paisaje encantador.